Primero Grecia. ¿Italia el próximo?

Articulo de The Economist

Italy under IMF supervision - Nov 4th 2011, 19:33 by Charlemagne

Los agitados países de la eurozona estaban obteniendo préstamos con condiciones y estricto monitoreo del FMI. Pero en la Cumbre del G20 que concluyó en Cannes hoy, la euro zona atribulada no obtuvo una moneda más, mientras Italia fue puesta bajo monitoreo del FMI.

Aunque los rendimientos de sus bonos han aumentado de manera alarmante Italia no ha tenido que pedir rescates (no todavía). Y, en un intento de asegurarle que no sucumba, llevándose consigo al euro, ha sido puesto bajo un especial régimen preventivo – un período de prueba  para asegurar que implemente  la muchas promesas que hizo para llevar a cabo las reformas diseñadas para promover el crecimiento y el balance del presupuesto para 2013. 

 La cortés ficción es que Italia “ ha invitado a” ese monitoreo, pero no es ningún secreto el hecho de que el gobierno de Silvio Berlusconi tiene problemas con la “credibilidad”. El presidente francés Nicolás Sarkozy, dice que el caso de Italia es “completamente diferente” del de Grecia, que ha impulsado a la acción a la Cumbre del G20 debido a la perspectiva del probablemente inminente incumplimiento de pago de su deuda.

 Al mismo tiempo, la posición de Italia es hoy marcadamente peor que la de España, que hasta este verano había sido visto como el país más probabilidad de caer después de Grecia, Irlanda y Portugal. Pero la perspectiva de España ahora es menos grave como consecuencia de una sucesión de reformas Y la decisión del primer ministro José Rodríguez Zapatero de no presentarse en las elecciones generales que se llevarán a cabo a fines de este mes.

 Por lo que Berlusconi, en los días finales de su Gobierno, se ha puesto en clase correctiva — una humillación para la tercera mayor economía en la zona del euro y miembro fundador de la Unión Europea. "Él es plenamente consciente de la gravedad de la situación. Y si no lo fue, lo es ahora” dice una alta fuente de los EU

 Apenas unos quince días atrás., ese tratamiento habría sido impensable. Funcionarios en Bruselas Cuentan que Van Rompuy había enviado a Berlusconi un borradores con las conclusiones de la última Cumbre Europea, haciendo referencia de paso a "compromisos específicos realizados por Italia y España".

 Berlusconi lo telefoneó diciendo que aludirlos de tal forma era “un escándalo”. La posición fiscal de Italia, con un superávit primario (antes de intereses) y deuda privada baja, fue más sana que la mayoría de otra zona de euro miembros, insistió  Berlusconi. La deuda alta de Italia fue producto del pasado, acumulado por los gobiernos anteriores Demócrata Cristianos y Socialistas de lo que él podría no rendir cuentas. "Yo siempre he querido llevar a cabo reformas," dijo Berlusconi a Van Rompuy. A lo que respondió el Presidente del Consejo Europeo: "Silvio, es hora de hacer sus sueños realidad."

 En la primera de dos cumbres europeas del mes pasado, Berlusconi fue convocado por la Canciller Angela Merkel, de Alemania y Nicolas Sarkozy, el Presidente francés, a presentar un plan de reforma creíble dentro de tres días, a tiempo para la segunda ronda de la cumbre el 26 de octubre.

 Líderes de la zona euro celebran las promesas de Italia pero, como como en pactos nucleares de la guerra fría, decidieron "confianza pero con verificación". La Cumbre declaraba:

“Invitamos a la Comisión para proporcionar una evaluación detallada de las medidas y para supervisar su aplicación y a las autoridades italianas a proporcionar oportunamente toda la información necesaria para dicha evaluación”.

 Una semana más tarde, el FMI también fue "invitado" a participar en el proceso de supervisión. Así Además de una humillación a Berlusconi, la decisión fue un signo de desconfianza al esperado rigor de los actos de la Comisión.

Cristine Lagarde (FMI)

Berlusconi quitó importancia a todo tomándolo como nada más que una auditoría, del tipo de la que las empresas buscan para chequear su contabilidad. “Auditorías”. La presidente del FMI, Cristine Lagarde, informará trimestralmente, en documentos públicos, los progresos de Italia. En sus palabras:

         “Vamos a comprobar la implementación de los compromisos que  ha hecho  Italia   bajo el compromiso de 15 páginas a los miembros de la zona euro hace un par de semanas . Por eso, verificación y certificación, si se quiere, y ejecución de un programa al que Italia se ha comprometido. En lo que mí concierne, yo podría ser laboriosa,  exigente y rigurosa pero estaré observando los compromisos que se han hecho para confirmar su aplicación”.

El problema que está en juego, y eso es lo que claramente fue identificado por las autoridades italianas y por sus socios, es una falta de credibilidad de las medidas que se anuncian. Por lo tanto, para atestiguar la credibilidad de esas medidas, es decir su aplicación, el instrumento típico que íbamos a usar es una línea de crédito de precaución. Italia “no necesita” los fondos que asociamos a estos instrumentos. Luego, el mejor instrumento que es el monitoreo fiscal.

 La cuestión de las líneas de crédito precautorias, condujo a un extraño incidente que destaca el problema de Berlusconi con la credibilidad. El primer ministro italiano dijo que el FMI le había ofrecido  una línea de crédito. Pero Lagarde dijo que esa oferta no se hizo. ¿A quién creer? La mayoría tomará la palabra de la señora Lagarde antes que la de Berlusconi.

Documento Original (Archivo PDF)